29 de noviembre de 2011

Hay amores...


Hay tantos y tantos amores… Muchos tenemos la suerte de vivir amores que difieren de otros, y por ello somos conscientes de que existen varios tipos. Algunos amores son mágicos, de los que creemos que durarán para siempre, y de hecho estamos totalmente convencidos, son con los que sonríes en cualquier sitio, y todo lo imperfecto te parece perfecto, hay amores con los que te encantaría que desapareciera el mundo, hay amores locos, fugaces, intensos, que por suerte antes de que te enganches ya han desaparecido, hay amores que te quitan el apetito, y otros que te ponen como una foca, hay algunos amores confidentes, que saben de tu vida y tus más íntimos secretos y hay amores que saben tu nombre. Hay amores cálidos, cómodos, amores con los que pasas tiempo y momentos, hay amores amigo, hay amores complicados que ni tu misma entiendes y hay amores tan fáciles… Hay amores tormenta donde siempre estás al límite, con los que no puedes dormir tranquila sin esperar que pueda pasar mañana, amores que te revolucionan y te encantan, hay amores calma, con los que te relajas y no te sorprendes. Hay amores dulces, de los que no te puedes despegar, y amores salados, que a veces te hacen falta. Hay amores esperanza, y amores decepción. Hay amores batalla, por los que debes luchar, perder, combatir. Hay amores que te debilitan y hay amores que te hacen fuerte. Hay amores nuevos, que apenas se disfrutan ni se sienten, y hay amores que se gastan con el uso y necesitan descansar. Hay amores droga y amores medicina, amores que te matan, amores que te curan, amores que te recuerdan otros amores, amores que te duelen, amores capricho, hay amores que no son amores, amores que duran tanto como la vida y amores que duran tanto como un día, hay amores reales y amores fingidos,  hay amores…………. hay amores sin palabras, amores que no se pueden explicar porque son incomprensibles hasta para nosotros mismos y posiblemente tengan un poco de todos los otros, estos amores son perfectos, y si algo he aprendido es que lo perfecto no significa que todo sea lo correcto, lo perfecto es aquello que nos hace aprender, crecer, es con lo que tu te sientes bien aunque el mundo no lo entienda, es atrevernos afrontar que a veces podemos perder, y podemos llorar tanto como sonreír  y aun así nos atrevemos,  es asumir que somos dueños de nuestros sentimientos, pero no somos dueños de poder cambiarlos.


11 de noviembre de 2011

11/11/11


Un día especial, un día de buena fortuna para los numerólogos y un día de catástrofe para los esotéricos, al fin y al cabo un día diferente en el que creemos que puede pasar algo, que se acaba el mundo, que nos toca la loteria.. Ese día tienes miedo, te abres, y repartes te quieros, te vistes con más delicadeza por si te cruzas con el amor de tu vida, observas todo con lupa para que no se te escape ninguna posible señal, ese día mandas besos y canciones con significado, sonríes a todos y te muestras simpática con los más antipáticos, porque hoy puede pasar algo, no se que, pero algo… Intentas evitar hacer lo que no te gusta, aunque tengas que ir al trabajo o a estudiar, pero vas de manera diferente, y si te suben el sueldo? Y si te quitan el examen del lunes?. Ese día vas a Mcdonals, o te comes una pizza familiar aunque revientes, (tienes que tener en cuenta que puede ser la última pizza). Antes de salir de casa te aseguras que tu móvil esté totalmente cargado, lo miras mas de lo normal, ¿ y si hoy te llega la llamada que cambiará tu vida? Hoy no cruzas cuando está en rojo, y eres paciente con los semáforos, quien sabe…. Hoy ves diferente la mirada de alguien, y piensas, uy! Yo creo que le gusto, hablas de una forma u otra con todas las personas importantes de tu vida y te despides para siempre, de broma, porque en realidad no crees que pase nada, pero ¿y si pasa y te quedas con cosas que decir?....
Hoy me levanté a las 8:00 am como siempre, desayuné mi café y mis tostadas, me vestí de manera quizás un poco mas especial, estuve estudiando, como cada día saque el Tupper de mami, y lo comí entre medio frío y medio caliente, me cepille los dientes, fui 5 horas a clase, volví a casa, y mire ansiosa el número de la ONCE, no vaya a ser que fuese millonaria y yo aún sin saberlo (aunque es difícil porque las Jakelines, la flaca, mis hermanas-primas y todas las personas a las que les enseñe por Whatsapp una foto de mi número confiada de que me haría millonaria, me lo hubieran hecho saber). Luego cené, vale, cené Mcdonals, y me acosté. A lo largo del día estuve hablando con las personas con las que no me importaría quedarme si se acaba el mundo, y de alguna manera u otra les hice sentir lo importantes que son para mí, y no saben que satisfacción, alivio y felicidad sentía por dentro de saber que si algo pasaba yo ya había dicho no todas, pero muchas de las cosas más importantes, a ellas, a ellos, y a él,  con palabras, con silencios, o con puntos suspensivos llenos de historias.
Asi que si, hoy fue un día normal, no se acabó el mundo, ni me hice rica, no paso nada absolutamente extraño el 11/11/11, nada que no pasara otro día cualquiera, pero para mi fue especial, y saben por que?
Porque desde el momento en que me desperté yo pensé que iba a ser especial, me creí que iba a ser especial, y que me iba a ocurrir algo especial, mis amigos se acordaron de que hoy podía pasarme algo especial, y todos esos pensamientos ficticios, todas esas ilusiones y toda esa confianza en algo hicieron que un día normal, (tirando a malo), se convirtiese en uno de los más especiales. Ojala existieran más fechas curiosas, más fines del mundo, más casualidades en el reloj, más volcanes a punto de estallar, más días que nos hagan sentir al límite, más momentos en los que sin ninguna base sólida más que tu propia ilusión, creas con tanta fuerza en algo que al final, lo acabas consiguiendo :) 


27 de octubre de 2011

Game over...

Todo en la vida es como un videojuego.
Cuando tenemos uno nuevo nos ilusionamos como si nunca antes hubiésemos jugado a ninguno, le dedicamos muchas horas del día y de la noche, ignorando por completo los demás y creyendo sin duda que si, que este será el mejor, el de mayor emoción, riesgo y aventura, es diferente, no hacemos otra cosa que hablar de nuestro nuevo juego y de todas las expectativas que tenemos con él. No es fácil pasar a la segunda fase, pasamos gracias a la cantidad de veces que fallamos y perdemos, logramos evitar caminos inadecuados, saltar trampas ocultas que ya descubrimos, disparar o poner un escudo en el momento adecuado, y tras esfuerzo, con dedicación y perseverancia, lo pasamos.
Cuanto más avanzas más confiada te sientes, vas dominando con cuidado la situación y sigues pensando que es el mejor juego del mundo, poco a poco jugar se convierte en un placer y no una obsesión como los primeros días. Cada vez se complica más, pues el grado de dificultad aumenta, y es cuando te das cuenta, si eres capaz de acabar el juego, o este te queda muy grande.
Puedes perder 5, 10, o 15 veces y seguir intentándolo(nadie te dijo que fuera fácil) y aun así puede que a la decimoquinta vez no lo consigas y aunque con pena pero orgulloso de ti mismo, no acabas el juego, pues es superior a lo que puedes, pero si lo consigues no habrá mayor recompensa y gratitud a tu esfuerzo.
Por otro lado, puedes quedarte a 3 o 4 niveles del final o a 3 o 4 niveles del principio porque, o te rindes sin molestarte ni esforzarte, o te da exactamente igual el juego, o eres un cobarde que no quiere complicarse y se conforma con creerse que la verdadera razón por la que no es capaz de acabar el juego (aún sin intentarlo), es por alguna de las excusas anteriores. Al fin y al cabo la próxima semana saldrá uno nuevo...
NO, No podemos rendirnos tan fácil, no podemos conformarnos con una vida llena de juegos incompletos y de fases inacabadas.
Gracias a aquellos que acabaron su juego, o supieron cuando fue el momento adecuado para rendirse, la vida esta llena de médicos, pilotos, personas casadas, o divorciadas, estudiantes a los 30 o 40, o trabajadores, músicos, diplomados, madres, curas, solteros, padres, homosexuales, artistas, obreros, hipotecados... Existió un momento en la vida de cada uno de ellos en que tuvieron que decidir, saltar la linea que delimita lo que quieres y puedes, de lo que no quieres ni puedes, gracias a ello, gracias a esa decisión, hoy están donde quieren, o donde pueden, pero habiendo hecho todo por intentarlo.
Si ya sabes de antemano que juego no quieres, no deberías ni aventurarte a intentarlo, sin embargo, si lo tienes claro, lucha, juega, pierde 20 veces y vuelve a intentarlo, llora, y cuando veas que no lo puedes conseguir, déjalo, pero párate, respira, y cómprate otro, cuando ya lleves varios juegos te darás cuenta de que, ..." No todos los juegos están hechos para todos los jugadores".....

30 de septiembre de 2011

Permítame un consejo.


Querida Santidad, no debe ser fácil ser el obispo de Roma, el sucesor de Cristo y la cabeza de la iglesia católica, debe ser duro llevar tantísima responsabilidad a cuestas, si me permite, le daré unos consejos:
¿ Y si empezamos por la igualdad, y usted vive igual que el mundo? ¿ Y si empezamos por la pobreza, y reducimos las 24.000 muertes al día por hambruna? ¿Y si empezamos por las guerras, y desaparecemos los millones de armas? ¿ Y si empezamos por evitar el dolor de reconstruir una casa después de una bomba? ¿Y si empezamos por la igualdad, entre homosexuales y heteros, la igualdad entre hombres y mujeres, la similitud entre África y Europa? ¿Y si empezamos por radicar los maltratos y suprimir la violencia? ¿Y si empezamos por ayudar, proteger, alentar, cobijar, y dar calidad de vida a los 26 millones de niños con Sida? ¿Y si empezamos a incriminar severamente a todos los pedófilos de la Tierra? ¿ Y si empezamos a repartir riquezas, y dar trabajo? ¿Y si esperanzamos con hechos a los padres que no tienen nada que dar a sus hijos? ¿ Y si evitamos las guerras y el desaliento de los familiares que llegan con uno menos a casa? ¿Y si empezamos por evitar las camas hechas de carton en las calles? 
Querido y beatísimo Padre, ¿Y si empezamos por la estética?


16 de septiembre de 2011

Good-bye summer!


Probablemente a todo el mundo le pase, o por lo menos en mi día a día es rutinario, pensar lo rápido que pasa el tiempo y lo poquito que saboreamos lo bueno, estamos ansiosos durante 7 meses para que llegue agosto, de repente llega, y se va.
Pero este agosto ha sido diferente…

Hay un momento en tu vida, en que deseas con todas tus fuerzas vivir, saboreas la comida de una forma diferente, disfrutas con el ruido del mar y hasta escuchas de manera distinta el ruido de la calle, llega un momento en que la música controla tu cuerpo y hablar durante horas con tus amigas es uno de los mas grandes placeres, cuando te entran estas ganas de vivir, sonríes al mundo y te da exactamente igual todo,  dejas pasar de largo la malicia y el que dirán, porque no hay nada que diga más que tus ojos, sientes que las mañanas tienen la temperatura perfecta, al igual que  las noches que son mágicas, hay días en los que no haces nada y hasta eso te parece adorable, y días en que no paras y te llenas de más vida y juventud, puedes estar igual de alegre con una caña o 2 vasos de agua, o igual de guapa con bikini o vestido, porque el maquillaje diario es tu sonrisa. 
Me encantan estas ansias de vivir, donde nada consigue sacarte de quicio, y se disparan nuestros índices de endorfina, disminuyen los recuerdos entristecedores y aumenta la sensación de felicidad sin una razón determinada. De repente valoras todo lo que tienes,  una casa, una familia, unos amigos, todo eso que has tenido siempre, y ahora te paras a pensar que es lo más grande que  podrás llegar a tener nunca,  y te sientes la más privilegiada del mundo. Disfrutas de las pequeñas cosas que te suceden a diario, tener sed y poder tomar agua, tener hambre, comer, tener sueño, dormir, tener la oportunidad de decidir, tumbarte en el sofá sin mirar la hora, ver y observar, hacer algo con la persona que quieres en el momento que elijas, escuchar y ser escuchado, dar o recibir un abrazo, o la cantidad de personas que te preguntan que tal el día, el día que valore eso, me di cuenta de cuán afortunada soy.
No os preocupéis, no hace falta esperar de nuevo agosto, para poder disfrutar de estos días de plenitud, ni siquiera tiene que durar solo un mes, cada uno es el verdadero jefe de su felicidad, y el dueño de cuanto te dura, huye lo mas que puedas de las personas negativas, no te van a traer nada bueno, ilusiónate con el futuro, despegándote del pasado y de las cosas malas que te suceden en el presente, rememora momentos felices de tu vida, no tengas miedo a enamorarte y a entregarte por completo, es una de las mejores sensaciones, pasa el tiempo libre disfrutando de los cosas que te dan placer y alegría, y siempre busca el lado positivo de todo, (todo lo tiene), no dejes que nadie te fastidie un día, un día, simplemente un día puede ser muy importante, aléjate de la rutina, cuenta algún que otro chiste, o llama a quien tengas un poco descuidado, llora de vez en cuando y haz sonreír a los demás, no hay mejor forma de vivir.
 Ojala se hayan sentido identificados con esta sensación casi indescriptible con palabras o pronto os sintáis, y no prolonguéis más las alegrías que pueden empezar a sentir desde hoy.

¡Feliz septiembre y feliz felicidad!

29 de junio de 2011

¡¡¡¡Cambio!!!!

No es fácil intentar cambiar o mejorar el mundo, simplemente por el mero hecho de intentarlo ya se debería valorar a las personas que se atreven. No es fácil porque no te dejan equivocarte, no te  permiten errores, ni fallos, somos muy exigentes con aquellos que tienen un poco de poder en sus manos, estas personas están miradas con lupa, pero por suerte, las lupas no solo nos dan una visión ampliada de los errores, también nos engrandece los aciertos, las mejoras, y las cosas hechas con corazón y esfuerzo, gracias a esto, esas personas auténticas, no deben tener miedo, y creo también que gracias a esto, estas personas tienen que atrever adentrarse en este sendero de rosas llenas de espinas, donde no todo es justo, pero la veracidad, honradez y compromiso se ven a mil kilómetros de distancia.
Un buen político es aquel que no se niega a cambiar y comprende que la vida cada día nos hace nuevas preguntas y que las respuestas no pueden ser las mismas, es aquel que esta preparado para estar, y también esta preparado para saber cuando ya no estar. Creo que ante tantos ideales políticos, lo que debe prevalecer es el bien común, actualmente nos encontramos mayoritariamente con un liderazgo de dos partidos opuestos, pensándolo de este modo, parece una locura, ambos no van a cambiar sus ideales, pero si hablamos de dos buenos políticos aun teniendo una ideología opuesta, estás diferencias y prejuicios no serán un problema de distanciamiento.
Pienso, que no todo es transparente, pero debemos  ser pacientes y comprensibles, y dar un voto de confianza a los que prometen mejorar nuestro futuro,  como siempre no hay mejor aliado que el tiempo, el nos dirá las respuestas a las preguntas que hoy nos hacemos.
A pesar de que en estos temas, “ nunca llueve a gusto de todos” no nos debemos olvidar de que detrás de cada político, hay una persona, con sus sentimientos y su vida, que todos tenemos derecho a opinar, criticar o juzgar los hechos de estos que se exponen, pero solo eso, sus actuaciones y decisiones.
Estoy de acuerdo, en que vivimos en un mundo de oportunistas y como en cada ámbito de nuestra vida,  no todos son auténticos, pero tengo la suerte, de conocer personas que si lo son, este tipo de personas  pone el corazón en cada acto, y puedo asegurar que se dejan la piel pensando en como mejorar hoy, recordando el pasado que no se debe repetir, y el futuro que se debe construir, son personas que se llevan el trabajo a casa, que debaten con la almohada que más pueden hacer por mejorar, ellos llegan antes que todos, y se van después de todos, ellos disfrutan cuando los demás disfrutamos, y sufren cuando los demás sufrimos, son seres humildes, que se comprometen con las metas propuestas, y hacen lo que esté en sus manos para conseguirlo, ellos dan ejemplo con su conducta personal y  política sea cual sea ésta, lloran cuando algo sale mal y la situación puede con ellos y sonríen con gratitud cuando ven compensado su trabajo, son los que tienen miedo a equivocarse y los que cuando parece que se van a rendir vuelven con más fuerza.
Es una gran responsabilidad a la que no todos somos capaces de someternos  y por ello debemos dejarles claro, que estaremos siempre ahí, cuando las cosas salgan bien, y cuando salgan mal, tenemos que valorar y respetar a estos valientes, que solo con mirarlos a los ojos, yo, duermo un poco más tranquila.


 Gracias por este gran esfuerzo, yo dejaría el mundo en tus manos. 

11 de junio de 2011

Desconocidos que se conocen muy bien.

Al leer esta frase, seguramente te ha venido alguien a la cabeza, todos tenemos un amigo, un amor, un familiar, que por situaciones a veces inexplicables desaparecen de nuestra vida, y sin darnos cuenta les perdemos la pista. Al principio todos pensamos que la situación cambiará, nuestros móviles se llenan de mensajes en la bandeja de salida, que nunca se enviarán, nos aprendemos cientos de repertorios que nunca diremos, y así, según avanzan los días, más avanza la distancia.                                             
Cada una de estas personas, deja una espinita clavada, que de tanto en tanto, te presiona, y te duele, cuando revives algún momento, cuando aparece un olor, cuando lees una tarjeta,  o en una fecha indicada.                                            

Pero este pulso, solo puede ganarlo el tiempo, esta lucha entre cabeza y corazón, entre el querer y no poder, el detestar y extrañar, el combate entre el convenir y el desear..
Nunca va a ser fácil, aunque sea la primera, la segunda o la tercera persona que se queda en el camino, el dolor puede ser igual de intenso, nadie te va a quitar esa tristeza o esa añoranza, debemos aceptar que a veces hay cosas que no se pueden explicar, y simplemente hay que aprender a vivir con ellas.


 A pesar de todo, la memoria del corazón olvida los malos recuerdos y magnifica los buenos, y gracias a esto podemos sobrellevar el pasado, pero, cada vez que intercambies una mirada,  ni el tiempo, ni el daño, ni la distancia, ni nadie, podrán cambiar, que si, que somos como desconocidos, pero que se conocen muy bien…